Con la crisis de 2.008 las matriculaciones de vehículos en España se redujeron a la mitad con respecto a los años de bonanza económica. Como consecuencia de ello, y en tiempos desfavorables para el bolsillo, los conductores o bien aguantaban más tiempo sus coches o si cambiaban de vehículo lo hacían en el mercado de segunda mano; un mercado en el que la mayor parte de las ventas están protagonizadas por coches con más de 10 años de antigüedad, los denominados “mileuristas” según el argot del sector.
La idea ampliamente admitida de que un coche cuanto más veterano más proclive es a pasar por el de taller es falsa. Está sucediendo todo lo contrario. A medida que un vehículo llega al final de su vida útil más se aleja de los talleres de reparación de automóviles, según un informe de Audatex que ha analizado más de cuatro millones de reparaciones. Según el estudio en cuestión los coches que alcanzan la década de uso ven reducida su visita al taller un 50% con respecto a sus años de juventud. Los vehículos que se hallan dentro de su primer lustro desde su fecha de matriculación son los que más visitan el taller por varios motivos: el kilometraje realizado, la garantía vigente y las amplias coberturas de las pólizas de seguro. Pasan, de media, dos veces al año.
Con más vejez, las visitas por el taller no pasan de una al año y normalmente coincidiendo con las vísperas de un período vacacional familiar o coincidiendo con una avería de las consideradas importantes y que haya que afrontar de manera imperiosa por no haber alternativa de transporte para dicha unidad familiar. Cuando un coche cumple 15 años las visitas por el taller se espacian y pasan a hacerse una vez cada dos años.
Y hablando de visitas al taller, ¿cuáles son las marcas de coches que los visitan menos?. Pues según un ránking elaborado por la OCU a raíz de una encuesta elaborada a principios de año tres firmas japonesas copan los tres primeros puestos de fiabilidad. Se abordó a más de 30.000 conductores europeos para que hablaran sobre la fiabilidad de sus vehículos. Honda es el fabricante que encabeza la lista, seguido por Lexus y Toyota (estas dos últimas marcas pertenecen al mismo grupo automovilístico).
La fiabilidad es la prioridad de los consumidores cuando van a comprar un coche, por delante del precio o el consumo del vehículos. Las averías son bastante frecuentes, ya que un tercio de los encuestados había sufrido alguna en su coche y, de ellos, el 16% se había quedado tirado alguna vez. Los problemas más habituales afectan al sistema eléctrico, seguido por los frenos y la electrónica del motor. Los conductores se gastan una media de 300 euros al año en reparaciones en el taller.
Las familias gastan menos en el seguro de coche que lo que destinan a talleres de reparaciones y mantenimiento, según la última edición de la Memoria Social del Seguro que elabora Unespa, donde también se estima que más del 40% de lo que gasta un hogar medio en transporte es para combustible. Cada familia destina más de un 17% de este presupuesto a las revisiones y arreglos del coche, el tercer gasto en importancia de lo presupuestado para el transporte familiar, tras la gasolina y el pago del coche.