Si aparcas en la calle, existen una serie de riesgos que has de asumir. Entre ellos, los más preocupantes son los causados por la propia naturaleza: lluvias extremas, granizadas, movimientos sísmicos, etc…
Si ocurre algo así y no se declara su localización como zona de desastre, y tu seguro a terceros no lo cubre, nadie pagará la reparación. Dependiendo de la intensidad del desastre el coche saldrá mejor o peor parado, aunque aun así en general las reparaciones por estas causas suelen ser muy caras, ya que como mínimo habrá daños en toda la carrocería y lunas.
Con GestiRep no tienes de qué preocuparte, ya que al poder subastar la reparación a talleres especializados en estas materias te saldrá mucho más barato.